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Las personas que tienen diabetes tipo 2 (DM2) deben enfrentarse a numerosos retos para mantener su calidad de vida. Conocer bien la enfermedad, ser consciente de sus riesgos, llevar unos hábitos de vida saludables y no bajar la guardia en el seguimiento de su patología, sobre todo, en tiempos de pandemia, son algunos de los desafíos a los que se enfrentan los pacientes de una enfermedad que afecta al 13,8% de los españoles.

Las cifras mundiales, además, obligan a mantener la atención sobre esta patología, puesto que 1 de cada 11 adultos padece diabetes y en el año 2040 todo apunta que sean 1 de cada 10, tal y como señala la Federación Internacional de Diabetes (IDF, por sus siglas en inglés). Con estas cifras de referencia se ha considerado la diabetes tipo 2, hasta la llegada de la COVID-19, como la pandemia del siglo XXI. A este escenario, debe añadírsele otro aspecto especialmente relevante: la relación que existe entre la diabetes tipo 2 y el riesgo cardiovascular.

 

 

Los riesgos de desarrollar problemas de corazón

Aunque la preocupación entre los pacientes con diabetes tipo 2 por desarrollar un evento cardiovascular ha aumentado un 10% respecto al año 2016, solo 2 de cada 10 personas afirman conocer la relación entre ambas patologías, según la Encuesta Creencias y Actitudes sobre la Diabetes, realizada por la Alianza Boehringer Ingelheim y Lilly en Diabetes, que ha impulsado la campaña de concienciación #DiabetesPorTuCorazón, una iniciativa que advierte sobre el vínculo que existe entre la diabetes y las complicaciones cardiovasculares.

Este es, precisamente, el caso de Antonio Lavado, paciente y presidente de la Federación de Asociaciones de Personas con Diabetes de Extremadura (FADEX) y vocal de la Federación Española de Diabetes (FEDE) “con 21 años me dieron el diagnóstico, pero yo no le hice caso a mi diabetes durante 27 años. Con 48, estaba realizando una prueba de esfuerzo en el hospital y tuve una parada cardiorrespiratoria. Ahí mismo me sometieron a un triple bypass. No era consciente de lo que me podía llegar a pasar”.

Las personas con diabetes tipo 2 tienen dos veces más riesgo de desarrollar problemas del corazón que las personas sin diabetes y entre el 50% y el 80% de quienes padecen diabetes tipo 2 fallecen por complicaciones cardiovasculares

Su caso no es aislado. De hecho, las personas con diabetes tienen dos veces más riesgo de desarrollar problemas del corazón que las personas sin diabetes, según una investigación que salió a la luz en la revista científica The Lancet en 2010. Además, entre el 50% y el 80% de quienes padecen diabetes tipo 2 mueren por complicaciones cardiovasculares, como infarto de miocardio o ictus. Pese a ello, el desconocimiento sobre la relación entre ambas patologías está ampliamente generalizado.

El diagnóstico temprano, una de las claves

A pesar de los grandes avances en los últimos años, entre el 50 y el 80% de los pacientes con diabetes tipo 2 siguen muriendo por complicaciones cardiovasculares, como infarto de miocardio o ictus. A esto hay que sumar el hecho de que la mitad de las personas con diabetes tipo 2 no sabe que la sufren, tal y como señala la IDF. “Podemos estar hablando de que la esperanza de vida de una persona de 50 años que sufre diabetes tipo 2 se puede ver reducida aproximadamente en unos cinco o seis años”, señala el doctor Antonio Pérez, presidente de la Sociedad Española de Diabetes (SED).

Para el doctor Pérez los motivos obedecen a dos aspectos: “Uno es el retraso en el diagnóstico de la enfermedad, que hace que no se trate y durante este tiempo esté afectando negativamente al organismo. Y otro es que más del 50% de los pacientes no mantienen un control de la diabetes y de factores de riesgo como la hipertensión y la dislipemia suficientemente bueno como para prevenir las complicaciones, específicamente, las cardiovasculares. Creo que este es el motivo fundamental”. Sin embargo, el experto destaca que “se está mejorando en el control y pronóstico de estos pacientes”.

Mantener siempre el seguimiento médico

Los expertos consideran fundamental que los pacientes mantengan un control médico adecuado de su diabetes tipo 2 para evitar el desarrollo de complicaciones cardiovasculares, ya que éstas son la principal causa de muerte entre este colectivo. El buen pronóstico depende, en gran medida, del control de la enfermedad, mientras que la falta de autocuidado, por el contrario, está asociada a un mayor riesgo de discapacidad, disminución de la calidad de vida y una mayor mortalidad, tal como señalan los profesionales médicos.

En España cada hora se diagnostican 44 nuevos casos de DM21, una cifra que va en aumento a pesar de que hasta en el 80% de las ocasiones pueden prevenirse con unos hábitos de vida saludables. Los pacientes, por sí mismos, tienen mucho por hacer. En este sentido, la alimentación y la práctica de ejercicio físico ayudan a controlar la DM2 y así prevenir la aparición de problemas del corazón.

Por todo ello, la campaña #DiabetesPorTuCorazón busca advertir a la población sobre los problemas cardiovasculares asociados a la diabetes tipo 2 y concienciar sobre cómo llevar un estilo de vida saludable puede limitar los efectos dañinos de la enfermedad. Testimonios como el de Antonio refuerzan esta iniciativa: “si yo hubiera sido consciente de los efectos de la diabetes y no hubiera abandonado mis hábitos de vida saludables -era corredor-, habría podido prevenir la parada cardiorrespiratoria”, reconoce.

La campaña #DiabetesPorTuCorazón busca advertir a la población sobre los problemas cardiovasculares asociados a la diabetes tipo 2 y concienciar sobre cómo llevar un estilo de vida saludable puede limitar los efectos dañinos de la enfermedad

Ese conocimiento al que hace referencia Antonio Lavado es, en su opinión, una de las tareas pendientes. Porque a los tres pilares que apuntan los expertos para prevenir y controlar la enfermedad –dieta saludable, ejercicio físico y adherencia al tratamiento-, él añade un cuarto igual de importante: la educación diabetológica.

Con su experiencia como paciente reclama la necesidad de que se tomen medidas para evitar que la gente llegue a desarrollar diabetes tipo 2 y para que aquellos que lo hagan sepan a qué se enfrentan desde el principio del diagnóstico. “Del mismo modo que se han hecho leyes antitabaco y las personas que fuman tienen claros los riesgos que conlleva seguir haciéndolo; o se ha logrado reducir las muertes en accidentes de tráfico gracias a las campañas de la DGT, por qué no hacer lo mismo con la diabetes”, se pregunta.

Peor pronóstico en caso de contagio por COVID-19

Esta iniciativa, además, destaca en el contexto actual marcado por la COVID-19. Aunque el riesgo de contagio por coronavirus no es mayor en las personas con diabetes, las complicaciones derivadas de la infección pueden ser más graves que en el resto de la población, apuntan los expertos. “Debemos intentar la máxima concienciación para evitar que estos pacientes se contagien”, afirma el doctor Ángel Cequier, presidente de la Sociedad Española de Cardiología (SEC).

“El hecho de que sean pacientes con un alto riesgo para presentar complicaciones nos obliga a ser muy exigentes, no solo con las medidas para evitar los contagios sino también para mantener estabilizada su enfermedad”, remarca el doctor Cequier. “Los pacientes de edad avanzada, en el momento actual, están muy sensibilizados acerca del riesgo del COVID-19. Debemos aprovechar este escenario para implicarles con respecto a los problemas de la diabetes”, destaca el médico, implicado en esta campaña que también cuenta con el aval de la Federación Española de Diabetes (FEDE), la Sociedad Española de Diabetes, la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) y la Fundación redGDPS.

El apoyo creciente del entorno

Los profesionales sanitarios hacen hincapié en aprovechar la coyuntura actual para insistir en un mayor control de la diabetes, en educación social, en hábitos saludables y en la importancia de recuperar las visitas médicas y exploraciones programadas no realizadas durante el periodo de confinamiento, ya sean de forma telemática o presencial cuando la situación lo requiera. Para los expertos implicados en #DiabetesPorTuCorazón, el paciente con patología crónica debe ser consciente de los riesgos y de la importancia que requiere el seguimiento de su enfermedad.

Antonio, como paciente, coincide en que esa responsabilidad y autocuidado por parte del paciente es fundamental. Y es que, “podemos pasar 15 minutos al año con el endocrino, pero el resto del tiempo estamos solos frente a la diabetes” y aporta una cifra “según un informe de adherencia al tratamiento elaborado por Farmaindustria, en torno al 40% de los pacientes con diabetes tipo 2 deja el tratamiento porque no ve resultados. Fomentando el autocuidado esa cifra bajaría”, insiste Antonio.

En un momento como el actual, conviviendo con la COVID-19, realizar un adecuado seguimiento de las personas con diabetes tipo 2 es primordial para controlar una enfermedad que afecta al 13,8% de los españoles

En la misma línea actúan las asociaciones de pacientes, como la Associació de Diabetis de Catalunya (ADC), que tienen como objetivo “proteger y mejorar la calidad de vida de las personas con diabetes y de sus familias. Para conseguirlo consideramos fundamental que el paciente acceda a la máxima información posible sobre la diabetes y a la mejor formación para gestionar su enfermedad”, explica César García, tesorero de la ADC.

Porque recibir los apoyos necesarios del entorno es decisivo. Este es un aspecto positivo que con los años va cobrando mayor importancia. La última Encuesta Creencias y Actitudes sobre la Diabetes destaca el papel creciente de familiares y amigos en el control de la patología. Una tendencia que va en línea con las recomendaciones médicas, ya que el tratamiento de la diabetes requiere un esfuerzo añadido al día a día del paciente crónico. De ahí que el conocimiento de sus familiares y amigos sobre la enfermedad suponga un avance importante en su calidad de vida.

Lee el artículo que esta aquí: Todo lo que debes saber sobre los riesgos cardiovasculares que implica tu diabetes tipo 2