Pensar en bajar de peso o simplemente en ejercitarse puede ser un reto duro para muchos por el compromiso y disciplina que requiere. Esa es la razón por la cual antes de tiempo desisten de su propósito.
De acuerdo con la doctora I-Min Lee, profesora de la Facultad de Medicina de Harvard, hay algunas alternativas que no tienen una alta exigencia, y que pueden resultar ampliamente beneficiosas para la salud. Así que dése una oportunidad pues quizás alguna de estas actividades se convierta en una manera de mantener su peso ideal, mejorar su equilibrio y resistencia, fortificar sus músculos y huesos y hasta evitar problemas no solo a nivel físico sino también mental.
Nadar es considerado por muchos como el mejor ejercicio. No solo es ideal para liberar el estrés, trabajar los músculos y eliminar tensiones mientras se queman calorías y se tonifica el cuerpo, sino que además ayuda a mejorar la capacidad pulmonar. Por tanto es recomendable para muchas personas.
No se requiere ser un gran nadador, pues también funciona hacer aeróbicos acuáticos para recibir estos beneficios. Así que estar en movimiento en el agua trabaja el cuerpo y ayuda a estar de mejor humor. Además aumenta la capacidad motriz y pone a trabajar la mente pues requiere concentración y coordinación.
El segundo ejercicio, que a pesar de su simplicidad resulta vigoroso, es caminar. Así es, dedicar unos pocos minutos al día a esta acción, le ayuda a mejorar los niveles de colesterol, controlar la presión arterial, fortalecer el sistema óseo y muscular. También se ha demostrado su efecto positivo en el estado de ánimo y en la reducción del riesgo frente a problemas de salud de toda índole desde cardiacos, hasta enfermedades graves como la diabetes, y la pérdida de la memoria.
Para hacerlo bien, basta con tener un calzado cómodo y empezar con paseos de entre 10 y 15 minutos. Poco a poco, podrá incrementar la distancia y la velocidad. El ideal, según Harvard, es lograr la mayor cantidad de caminatas que pueda en la semana con una duración de 30 minutos o más.
Una actividad que se ha popularizado en las últimas décadas y que entra en esta selección es la disciplina ancestral china conocida como Tai Chi. La razón es sencilla, en esta práctica se combina el movimiento y la relajación, un balance perfecto para trabajar cuerpo y mente.
En el Tai Chi se realizan una serie de movimientos suaves y fluidos, que ayudan a reducir el estrés y la ansiedad, y de paso aumentan la flexibilidad y el equilibrio. Aunque este arte marcial es apto para todas las edades, sin importar la condición física, la doctora Lee destaca que es particularmente bueno para las personas mayores, por cuanto ayuda al equilibrio, un componente importante del estado físico que perdemos a medida que envejecemos.
Los ejercicios de fuerza, para los que no se requiere equipo o tal vez solo levantar unas pesas ligeras, son ideales para la resistencia muscular, tonificación, quemar calorías y una apropiada función cerebral. Este tipo de entrenamiento no es suficiente si su deseo es el de aumentar sus músculos, sin embargo, sí es bueno para mantenerlos, pues con el paso del tiempo van perdiendo su fuerza.
La recomendación es asegurarse de hacerlos en la forma adecuada para evitar lesiones, y en el caso de las pesas empezar tan solo con un par de libras, podrá ir aumentando en la medida que sienta que puede hacerlo.
Por último, pero no menos importante, está hacer los ejercicios de Kegel, que sirven tanto a mujeres como a hombres para fortalecer los músculos del suelo pélvico, encargados de sostener la vejiga. Poca atención se les presta, obviando que ejercitarlos contribuye a evitar la incontinencia.
Lo mejor de estos ejercicios del suelo pélvico es que se pueden hacer en cualquier momento. Lo que debe hacer es apretar los músculos que usa para contener las ganas de orinar. Se recomienda contraerlos solo por tres segundos, y luego soltar. Repetir esa acción 10 veces y hacer esa serie entre 4 y cinco veces al día.
Así que recuerde que la principal sugerencia para mantenerse en forma es realizar alguna actividad física que aumenta su frecuencia cardíaca y el consumo de oxígeno del cuerpo, al menos durante 30 minutos al día. Luego sume a esto al menos dos días a la semana de ejercicios de fuerza.
Lee el artículo que esta aquí: Según la Universidad de Harvard estos son los mejores ejercicios para estar en forma